Ya os anuncié en el post anterior que este sería un DIY veraniego y colorido. Y así ha quedado, como veis en la foto. He utilizado pintura textil color coral y estoy encantada con el resultado. Al final del post os mostraré dónde he colocado la telita en cuestión....jijijiji.
Pues seguimos con el lío.....MATERIALES:
- Tampón casero
- Tela del tamaño que queráis, yo la he usado de 40x40 cm
- Pincel
- Pintura textil
Pues vamos allá...lo primero es proteger la superficie de trabajo, pues si bien la pintura textil no se arranca de la tela una vez seca, en la madera o plástico también puede dejar manchas difíciles de quitar. Yo he colocado un cartón debajo.
Vertemos un poco de pintura textil en un tapón o tapadera para después aplicarla con el pincel sobre el sello.
¿Por qué lo aplico con el pincel y no mojo el sello directamente con la pintura? Porque así controlo la cantidad de pintura que quiero estampar. Si lo mojáramos directamente, aplicaríamos más pintura de la cuenta y pringaríamos el trabajo, con el consecuente gasto de pintura innecesario.
Apretamos bien el sello sobre la tela, empujando con la yema de los dedos si hiciera falta.
Retocamos con el pincel aquellas zonas que el sello no ha logrado cubrir. Una vez seca la pintura, podemos planchar la tela del revés para hacer que el estampado sea más duradero.
Y este es el rincón donde he colocado la tela, a modo de tapete o camino de mesa. Es una mesa Lack de IKEA que estaba un poco sosa. Ahora me encanta el resultado...¿y a vosotros?
Feliz fin de semana pomelillos :)