¿Quién no ha hecho un chisme de estos en el colegio? ¡¡¡Claroooo, el famoso pompón de lana!!! Hoy día venden unos artilugios de plástico que sirven para hacer estas bolas, pero hay una forma mucho más rústica y económica para hacerlos.
¿Para qué pueden servir estos pompones?
- Para decorar el envoltorio de un regalo.
- Para adornar un árbol de navidad.
- Para colocar en los gorros de lana, bufandas, jerseys....
- Para hacer muñecos.
Bueno, que me lío más que una persiana....vamos con los MATERIALES:
- cartón
- lana
- dos objetos redondos, uno más grande y otro más pequeño
- lápiz
- tijeras
Comenzamos dibujando sobre el cartón un círculo grande. Yo he usado una taza normal y corriente. Para el círculo más pequeño, que va dibujado en el centro, he usado un tapón de desodorante. Necesitamos dos círculos.
Cortamos los dos círculos con mucho cuidadito, sobre todo en la parte central. Os costará un poco más, pero despacito y todo sale.
Medimos un metro y medio aprox. de una hebra del ovillo y vamos añadiendo nuevas hebras sin cortar el hilo...unas 7-8, depende del grosor que queramos el pompón.
Colocamos los dos cículos juntos y vamos liando alrededor toda la lana hasta que queda un trocito, lo cortamos y lo desechamos.
Cortamos con la tijera las hebras, metiendo la punta entre los dos círculos de cartón. Este paso lo hacemos despacito para que no se salgan los hilos.
Cogemos un cabo de lana de unos 30-40 cm y los pasamos entre los dos cículos de cartón y hacemos un nudo de cirujano apretando bien. Ahora con mucho cuidado, sacamos los dos círculos de cartón, primero uno y después el otro. Estos nos servirán para hacer más pompones.
Recortamos los hilos que hayan quedado más largos, par igualarlos con los demás.
Nuestro pompón estará listo para usar y para darle mil vidas bonitas y decorativas.